Que alegría poder ser triste hoy...

Todo tiene un límite... uno no puede vivir intentando cumplir los deseos del corazón si tras cada intento se ve más perjudicado; Cuando cada nueva idea, cada plan, cada ilusión es tirada por la borda por momentos inservibles, por horas descartables en las que uno debe simular felicidad para intentar complacer a quien no ve más allá de si mismo, las ganas de seguir se van, la fatiga se acumula hasta estallar...
Sé que era el motivo de mi existir, se que era lo que me daba ganas para seguir, pero todo tiene un límite... ¿Valen tanto esos momentos de falsa ilusión como para seguirme manteniendo alejado de mi mismo? Todo cambio, todo menos yo... que me quedé con las viejas versiones de la vida y que recién ahora me doy cuenta de como son las cosas, pero aún así yo la sigo amando... y si, es así, no lo puedo evitar, sé que la distancia tampoco me hará olvidarla pero alguna parte de mi me dice que en el futuro me voy a agradecer a mi mismo esta decisión...
Sufro, la extraño, pienso y vuelvo a sufrir pero todo tiene un límite... Espero haber acertado con esta dolorosa decisión, no tenía muchas opciones, blanco o negro yo sabía que ambos dolerían; Ahora hay que aguantar, resistir y seguir alejandome, por el momento las cosas van bien pero no falta mucho para que la vuelva a ver, espero no ser traicionado por mi corazón como siempre...
Me duele decir que el tiempo será quien decida esta vez, ese tiempo que no tengo se va a encargar de liquidar esta jugada o quizás sólo la deje picando a la espera de una nueva decisión... hoy por hoy no estoy en condiciones de afrontar ningún partido, las lesiones del corazón tardan tiempo en sanar y ya son varias las que se vienen acumulando... Yo creo que todo tiene un límite, y este es el mio.

Posted by Leo Armatti | en 22:53

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